FESEDA SE DIVIERTE A COSTA DE INDEPENDIENTE
Feseda se da un festín a costa de un gris Independiente que jugó gran parte del partido con un hombre menos. La expulsión, a mitad de la primera parte, condicionó el encuentro. La buena actuación del guardameta local evitó una goleada aún más sonrojante.
LAS CLAVES:
- Expulsión determinante: El equipo rojiblanco se vio superado por las circunstancias, situación que aprovecharon los visitantes para desplegar todo su juego ofensivo con libertad y acierto.
- Nº14 marcó la diferencia: Llevó las riendas del juego ofensivo de Feseda. Suyos fueron el segundo y tercer gol de los verdes.
- ... y gracias: La brillante actuación de Mario, el mejor de Independiente, impidió un resultado aún más bochornoso.
INDEPENDIENTE 2 - FESEDA 5
Independiente: Mario, Rojo, Piri, Germán, Ricardo, Quirri, Jorge. (Iván, min.6') (Pani, min.7') (Ramón, min.25')
Feseda: Nº1, Nº2, Nº4, Nº5, Nº7, Nº10, Nº14. (Nº3, min.14') (Nº6, min.17') (Nº8, min.18')
Goles:
1-0: Buena asistencia de Quirri que culmina Ricardo cruzando el balón por bajo.
1-1: Balón desde la banda de Nº10 que remata en el área pequeña Nº2.
1-2: Jugada personal de Nº14 que define con frialdad ante Mario.
1-3: Nº14, tras recortar a un defensa, traspasa la red con un disparo seco.
1-4: Ramón, en un intento de despejar el balón, marca en propia meta.
2-4: Jorge, tras una jugada individual.
2-5: Nº10 se planta solo ante el portero, marcando por alto.
Árbitro: Tomás, del colegio de Azuqueca. Expulsó por doble amarilla (sic) a Rojo. Acertó en el penalti y en la consiguiente expulsión. Supo llevar perfectamente el partido.
Incidencias: Partido correspondiente a la novena jornada de la Liga de Azuqueca. Encuentro disputado en el campo número dos ante ningún espectador.
Incidencias: Partido correspondiente a la novena jornada de la Liga de Azuqueca. Encuentro disputado en el campo número dos ante ningún espectador.
Crónica:
La insuficiencia persigue a Independiente. Pese a que en algunos intervalos da la sensación de ser un buen equipo, los últimos partidos nos muestran que su juego está más cerca de la vulgaridad que de la excelencia. Si a estos ingredientes le sumamos la inferioridad numérica, extraemos como resultado que Feseda sacó provecho de las miserias de un equipo roto e incapaz.
Fueron los locales quienes saltaron al campo con mucha mayor entereza. Pronto llegaría, fruto de un robo de balón en la zona de tres cuartos, el primer tanto del partido: Quirri recupera la posesión y asiste a Ricardo, que marca ajustando el balón al palo izquierdo del portero. La desventaja obligó al equipo visitante a aumentar la distancia de sus líneas, forzando el repliegue de Independiente y haciendo su salida del balón más farragosa; de esta manera se fue adueñando del partido y la réplica en forma de gol no tardaría en llegar: Germán falla en el marcaje a Nº10, que se interna por la banda y mete un centro al área que remata en boca gol Nº2.
Tras el empate, Independiente trató de volver a combinar pero era cada vez más incapaz de crear peligro, tan solo con un disparo aislado de Jorge que se marcharía por encima de la portería del equipo verde. El grueso de las ocasiones eran de Feseda, siendo la más clara un disparo ajustado de Nº10 desde fuera del área que mandaría Mario a córner.
Pronto se sucedería la jugada que iba a cambiar el devenir del partido: Nº14 recibe el balón al borde del área, encara zafándose de Rojo, supera a Mario y chuta a gol. El disparo es repelido por el zaguero local con una zamorana. Penalti, segunda amarilla (sic) -de libro- y más de medio partido por jugar con un hombre menos. El penalti sería blocado por Mario, que adivinó las intenciones de tiro de Nº14.
La superioridad numérica originó un monólogo de ocasiones que Mario se encargaría una y otra vez de interceptar. La más clara, un barullo a la salida de un córner que sacaría el veterano guardameta con dificultades bajo palos. Aún con el susto en el cuerpo se daba por concluída la primera mitad.
El segundo tiempo continuó por los derroteros del final de la primera parte: Feseda creaba ocasiones cada vez con mayor reiteración mientras que Independiente repelía como podía los golpes, gracias a la soberbia actuación de Mario y a la imprecisión de cara a puerta de los delanteros visitantes. Era sólo cuestión de tiempo que se desnivelara la balanza en favor de los verdes y el encargado de desquebrajar el encuentro se personificó en la figura de Nº14, que con su técnica rebasó finalmente el vaso de las oportunidades. El delantero marcaría el segundo y el tercer gol de manera prácticamente idéntica: partiendo desde la banda, recortando a un defensor y ajustando al palo derecho de la portería de Mario.
Independiente buscó recortar distancias sumando más efectivos a su línea de ataque, lo que propició más espacios y más ocasiones para ambos conjuntos. Jorge, en una internada por la banda, pudo hacer el segundo gol pero el cancerbero visitante lo evitaría sacando una mano salvadora.
A diez minutos del final, llegaría la sentencia: Nº8 centra desde la banda y Ramón marca un autogol tras intentar despejar el balón. La victoria ya estaba en el bolsillo de Feseda y sólo Jorge alimentaría las remotas esperanzas de remontada con un gol tras un desajuste en la defensa de la zaga visitante.
El resultado quedaría maquillado -finalmente- con la consecución del quinto gol, un tanto de bella factura de Nº10 que, tras regatear a Pani, pica con elegancia por encima de Mario.
Independiente pierde una gran ocasión para alejarse de la permanencia y, tras esta jornada, puede entrar -por primera vez en la temporada- en posiciones de descenso a la tercera división de la Liga de Azuqueca.
Los Protagonistas:
El Duro: Ramón. No supo controlar su ímpetu en alguna ocasión en que pudo hacer daño a algún rival. Pasado de revoluciones.
El Dandy: Jorge. Aportó verticalidad al ataque de Independiente. Sólo él dio sensación de peligro en la segunda mitad.
El Crack: Mario. No mereció el castigo del sábado. Salvó varios goles cantados.
¡Vaya Día!: Rojo. Su expulsión cambió radicalmente el partido.
Visite la crónica del blog de FESEDA aquí.
Un saludo.
Jesús Ruiz.
La insuficiencia persigue a Independiente. Pese a que en algunos intervalos da la sensación de ser un buen equipo, los últimos partidos nos muestran que su juego está más cerca de la vulgaridad que de la excelencia. Si a estos ingredientes le sumamos la inferioridad numérica, extraemos como resultado que Feseda sacó provecho de las miserias de un equipo roto e incapaz.
Fueron los locales quienes saltaron al campo con mucha mayor entereza. Pronto llegaría, fruto de un robo de balón en la zona de tres cuartos, el primer tanto del partido: Quirri recupera la posesión y asiste a Ricardo, que marca ajustando el balón al palo izquierdo del portero. La desventaja obligó al equipo visitante a aumentar la distancia de sus líneas, forzando el repliegue de Independiente y haciendo su salida del balón más farragosa; de esta manera se fue adueñando del partido y la réplica en forma de gol no tardaría en llegar: Germán falla en el marcaje a Nº10, que se interna por la banda y mete un centro al área que remata en boca gol Nº2.
Tras el empate, Independiente trató de volver a combinar pero era cada vez más incapaz de crear peligro, tan solo con un disparo aislado de Jorge que se marcharía por encima de la portería del equipo verde. El grueso de las ocasiones eran de Feseda, siendo la más clara un disparo ajustado de Nº10 desde fuera del área que mandaría Mario a córner.
Pronto se sucedería la jugada que iba a cambiar el devenir del partido: Nº14 recibe el balón al borde del área, encara zafándose de Rojo, supera a Mario y chuta a gol. El disparo es repelido por el zaguero local con una zamorana. Penalti, segunda amarilla (sic) -de libro- y más de medio partido por jugar con un hombre menos. El penalti sería blocado por Mario, que adivinó las intenciones de tiro de Nº14.
La superioridad numérica originó un monólogo de ocasiones que Mario se encargaría una y otra vez de interceptar. La más clara, un barullo a la salida de un córner que sacaría el veterano guardameta con dificultades bajo palos. Aún con el susto en el cuerpo se daba por concluída la primera mitad.
El segundo tiempo continuó por los derroteros del final de la primera parte: Feseda creaba ocasiones cada vez con mayor reiteración mientras que Independiente repelía como podía los golpes, gracias a la soberbia actuación de Mario y a la imprecisión de cara a puerta de los delanteros visitantes. Era sólo cuestión de tiempo que se desnivelara la balanza en favor de los verdes y el encargado de desquebrajar el encuentro se personificó en la figura de Nº14, que con su técnica rebasó finalmente el vaso de las oportunidades. El delantero marcaría el segundo y el tercer gol de manera prácticamente idéntica: partiendo desde la banda, recortando a un defensor y ajustando al palo derecho de la portería de Mario.
Independiente buscó recortar distancias sumando más efectivos a su línea de ataque, lo que propició más espacios y más ocasiones para ambos conjuntos. Jorge, en una internada por la banda, pudo hacer el segundo gol pero el cancerbero visitante lo evitaría sacando una mano salvadora.
A diez minutos del final, llegaría la sentencia: Nº8 centra desde la banda y Ramón marca un autogol tras intentar despejar el balón. La victoria ya estaba en el bolsillo de Feseda y sólo Jorge alimentaría las remotas esperanzas de remontada con un gol tras un desajuste en la defensa de la zaga visitante.
El resultado quedaría maquillado -finalmente- con la consecución del quinto gol, un tanto de bella factura de Nº10 que, tras regatear a Pani, pica con elegancia por encima de Mario.
Independiente pierde una gran ocasión para alejarse de la permanencia y, tras esta jornada, puede entrar -por primera vez en la temporada- en posiciones de descenso a la tercera división de la Liga de Azuqueca.
El Duro: Ramón. No supo controlar su ímpetu en alguna ocasión en que pudo hacer daño a algún rival. Pasado de revoluciones.
El Dandy: Jorge. Aportó verticalidad al ataque de Independiente. Sólo él dio sensación de peligro en la segunda mitad.
El Crack: Mario. No mereció el castigo del sábado. Salvó varios goles cantados.
¡Vaya Día!: Rojo. Su expulsión cambió radicalmente el partido.
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Un saludo.
Jesús Ruiz.
¡Tú! ¡Sí, es a tí, muerto de hambre! Pincha en la imagen de Neobux y gana dinerito mú rico para comprarte movidas muy guapas a costa de clicar en páginas de mierda llenas de virus.
Muy buena crónica! Mola leer el mismo partido desde otro punto de vista.
ResponderEliminarUn acierto lo del escaneo del acta!
Hay pequeños errores sobre los dorsales, pero es totalmente lógico porque es imposible estar al partido, y a almacenar datos en el disco duro para luego hacer el resumen.
Suerte!
Ya, si lo que suelo hacer es inventármelos jajaja, pensé en copiar vuestra alineación de tu crónica pero me parecía un poco chuzo...
ResponderEliminarGracias por escribir y suerte en la liga!
Un desastre de partido... Para el próximo con más ganas!!! Buena cronica Rojo!!
ResponderEliminarUnque tarde, he leido la crónica de éste partido... Madre mía!!! Rivales directos y derrota abultada... Lo que vamos a sufrir esta temporada!!!
ResponderEliminarMario
Feseda supo jugar mejor con el tempo del partido, no se amilano con el resultado en contra y no se apresuro ni agobio para remontar. Cosa que a los jugadores de Independiente (a mi el primero) nos cuesta muchísimo, en seguida tiramos para arriba, subimos demasiado las revoluciones.
ResponderEliminarComentar que nuestro rival dispuso de sus mejores ocasiones a raíz de la expulsión del jugador local, que no logró materializar gracias a la gran actuación del cancerbero de Independiente.
Esperemos revertir la actual tónica de malos resultados y obtener resultados positivos en las próximas jornadas y afrontar la 2ª vuelta con cierto margen de error, del que actualmente no disponemos.
Genial el analisis, estoy esperando el de la última jornada, no lo dejes Rojo, que mola.
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